viernes, 30 de mayo de 2008

On ne tue point les idées

Querido Ariel: Nos conocimos, no sabemos muy bien porque pero aquí estamos y así tal vez es como comienza la historia, como comienza el prólogo de este blog y como comienza la creación de nuestro reino, nuestro castillo de palabras.
Somos dos extraños con características similares tratando de volcar en palabras nuestros pensamientos y por eso creo que inauguramos este espacio para escribir lo que queramos, sabiendo que aquí no hay reglas ni condiciones, sólo hay libre expresión.
Lo principal es la imaginación, y yo imagino Ariel, yo imagino cosas, yo soy una de esas personas que creen en el sentimiento de lo fantástico. Yo, Lielit -Lucía, Lucía –Lielit, fiel a Cortázar, me niego a aceptar la realidad tal como quieren imponérmela, yo veo el mundo de una manera distinta. Te extiendo mí mano, te invito a mi mundo.
Por último palabras de Pizarnik para tomarlas con café:
No quiero ir nada más que hasta el fondo.

Querida Lucía: ¡Cuántas veces hubiera dado la vida entera porque tú me pidieras llevarte el equipaje!
Me enorgullece abrir contigo este espacio, este blog, flog, chot, o como quieran llamarlo los cibernautas de los que disto. Así como disto del centro de estudiantes de tu universidad. Así como disto del cantante de lo' Jóvene' Pordiosero'.
Pero como no disto de vos, me alegra tener un lugar para compartir nuestras ideas, nuestra energía psíquica, que suelta es un peligro. Enjaularla en un sitio web es lo más seguro para todos.
Dejo en este primer posteo a modo de prólogo una frase de Fourtoul que Domingo Faustino Sarmiento escribió con carbón en una pared cuando escapaba de la mazorca de Rosas al exilio en Chile: On ne tue point les idées
Creo que esta frase alcanza para resumir el objetivo de este blog. Esta frase significa "las ideas no se matan".